Empezar de cero: limpiar y planchar primero
Antes de doblar cualquier mantel redondo, asegúrese de que esté limpio y sin arrugas. Si está recién lavado, páselo rápidamente por la plancha. Esto ayuda a evitar que se fije y le ahorra tiempo la próxima vez que lo necesite.
No importa el tamaño del mantel redondo, ya sea pequeño o de 228 cm, empezar con una superficie lisa marca la diferencia. Colócalo sobre una mesa, una cama o incluso el suelo, según el espacio disponible.
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Cómo doblar un mantel redondo
Profundicemos en el sencillo método de plegado que funciona para cualquier forma, color o estilo, incluido un mantel redondo negro o uno con estampados festivos.
1. Dóblalo por la mitad
Empieza doblando el mantel transversalmente en un semicírculo. Este primer doblez es importante, ya que te da un borde recto con el que trabajar, lo que facilita mucho los siguientes pasos.
Esto funciona igual si doblas un mantel redondo de 152 cm o de 182 cm . El truco está en alinear bien los bordes para que el doblez quede parejo.
2. Dóblalo nuevamente para formar un rectángulo largo.
A continuación, toma el borde redondeado y dóblalo hacia el borde plano y recto. Tendrás una forma rectangular alargada. Si cuelgas los manteles, este es un buen punto para terminar. Pero si quieres guardarlos en un cubo o cajón, continúa.
3. Doblar longitudinalmente
Ahora, dóblala a lo largo para que los dos extremos más cortos se unan. Esto compacta la tela y empieza a parecer menos un círculo y más un bulto ordenado.
4. Doblar nuevamente para un almacenamiento compacto
Dóblalo a lo largo una vez más. Dependiendo del tamaño de tu espacio de almacenamiento, este podría ser el último doblez. Para contenedores más compactos, dóblalo una vez más para crear un pequeño cuadrado que se apile fácilmente sin amontonarse.
Este es un gran método si estás usando una tela más grande, como un mantel redondo de 90 pulgadas, que necesita caber en un espacio más reducido.
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Consejos para guardar sus manteles redondos
Una vez doblado, el mantel está listo para guardarlo. Colócalo en un cajón, un cubo de basura o cuélgalo si tienes espacio. Para artículos de temporada, como un mantel redondo navideño, guárdalo con el resto de la decoración navideña para que sea fácil encontrarlo más tarde.
Usa papel de seda sin ácido entre los pliegues si guardas ropa de cama antigua o telas que no usas a menudo. Esto ayuda a mantener la tela en perfecto estado.
Elegir el ajuste correcto
Antes de doblar o incluso comprar un mantel, conviene saber el tamaño de la mesa. Entonces, ¿ cómo medir una mesa redonda para que el mantel quede bien?
Fácil. Mide el diámetro de tu mesa (de un borde a otro). Luego, decide cuánta caída quieres (el sobrante a cada lado). Súmale el doble de esa caída al diámetro de tu mesa para conseguir el mantel que mejor se adapte.
Por ejemplo:
Si su mesa mide 48 pulgadas de ancho y desea una caída de 6 pulgadas, busque un mantel redondo de 60 pulgadas .
Por qué es importante doblar correctamente
Doblar tu mantel correctamente ayuda a prolongar su vida útil. Además, te ahorra tiempo y estrés: se acabó tener que planchar las arrugas difíciles justo antes de que lleguen tus invitados. Ya sea un pequeño mantel redondo para las comidas diarias o un llamativo mantel redondo negro para ocasiones formales, guardarlo correctamente lo mantiene impecable y listo para usar.
Además, si cambias de diseño con frecuencia (por ejemplo, si usas un mantel redondo navideño durante las fiestas y un estilo minimalista durante el resto del año), este método de plegado te ayudará a mantenerte organizado y sin desorden.
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Un último consejo
¿Quieres que tu mantelería luzca impecable en tu próxima cena o evento? Mientras doblas manteles, prueba también algunas técnicas para doblar servilletas . Con solo unos pliegues extra, tu mesa lucirá espectacular .
Doblar un mantel redondo no es tan complicado como parece. Con unos sencillos pliegues, puedes guardarlo de forma ordenada, sin arrugas ni desorden. Solo recuerda: empieza de cero, dobla por la mitad, forma un rectángulo y vuelve a doblar para que se ajuste al espacio. Tanto si trabajas con manteles redondos de tamaño diario como si simplemente quieres aprender a doblar uno después de las fiestas, esta guía te ayudará.
¿Necesitas un mantel nuevo? Considera el tamaño de tu mesa, el estilo que buscas y si necesitas uno para una temporada especial o para uso diario. ¡Que lo pliegues!
